Finalmente la pude ver la esperada adaptación al cine de WarCraft. Tenía las espectativas bajas después del primer review de la crítica. Y aunque puedo entender de donde vienen, como Fan de la franquicia la película es un festín visual, técnicamente está muy bien lograda.
Desde las ambientaciones de las ciudades como Stormwind, las edificaciones Orcas o incluso un guiño pequeño a Ironforge, todo bien. Pero también los personajes orcos son pesados, poderosos y diferentes entre sí, súper bien caracterizados. Las armas son tal cual como los juegos, los escudos y el audio. Puro regalo a los fanáticos. Fuertes golpes a la nostalgia.
El ritmo de la narrativa es acelerado, poco tiempo para tanto desarrollo, se siente por momentos rápido pero por lo mismo en instantes poco “serio” para alguien que va en búsqueda de una coherencia absoluta en la trama. Sin embargo, funciona, por que en lo que dura la película pasan muchas cosas y no hay descanso ni estancamiento de las acciones, es una buena película de aventuras, un poco light y simple como lo fue también el juego en sus inicios. Bien también.
Los personajes son pocos y bien claros, están claras sus motivaciones y no hay mucha profundidad en su desarrollo, destacándose por lejos Durotan, el protagonista orco que es el motor del conflicto y el a mi gusto – a pesar del cgi -más “querible”. Solo al final de la película logré hacerle barra a Lothar, Garona y Khadgar, lo que fue reconfortante al cierre de toda la aventura.
Me gustó, Blizzard logró con guiños, arte y garra dejarme contento con WarCraft finalmente en el cine. Esta entrega al igual que los juegos, son los cimientos de un potencial fantástico con grandes y épicas historias, quedo a la espera con una sonrisa, cosa que veía difícil después de tanto trailers extraños y varios reviews. 🙂